LA BENDICIÓN ES LA VOLUNTAD DE DIOS


Por John Hagee
“Mi Dios, pues, suplirá todas mis necesidades conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús”. Filipenses 4:16
Noten que dice “necesidades”, no “codicias”
Amado, ruego que seas prosperado en todo así como prospera tu alma, y que tengas buena salud”. 3 Juan 2:1. Recuerda la conexión entre lo espiritual y lo material.
“Los leoncillos necesitan, y tienen hambre; pero los que buscan a Jehová no tendrán falta de ningún bien” Salmo 34:10
“El Señor es mi pastor; nada me falta” Salmo 23:1
“Y vendrán sobre ti todas estas bendiciones, y te alcanzarán, si oyeres la voz de Jehová tu Dios”. Deuteronomio 28:2. “El Señor te dará ciudades grandes y buenas que tú no edificaste, y casas llenas de todo bien, que tú no llenaste, y cisternas cavadas que tú no cavaste, viñas y olivares que no plantaste, y luego que comas y te sacies“. Deuteronomio 6:10-11. Si honraras a Dios, El te dará el poder para obtener riquezas. El desea que tú prosperes hasta que los malvados te miren y digan “¿por qué ellos prosperan? Y los malvados digan “Ellos son hijos del Señor y la bendición de Dios está sobre ellos” Esa es la voluntad de Dios para tu vida!
Pero a medida que piensas la palabra y hablas la palabra, debes actuar según la palabra de Dios. Aquí es donde muchos cristianos se detienen — no actúan según la palabra. Moisés tuvo que poner su vara en el agua antes de que el mar se dividiera. Pedro tuvo que bajar del bote antes que pudiera caminar sobre las aguas. Elías tuvo que poner agua alrededor del sacrificio antes de que el fuego cayera del cielo. ¿Piensas que el entendió eso? No, no fue así.
Si todo lo que puedes obedecer es lo que entiendes, entonces nunca vas a obedecer a Dios. Algunos de ustedes solo siguen al Señor hasta cuando su lógica puede entender – lo que significa que nunca llegarán más allá del primer grado en fe. El hombre con la mano seca tenía muchas razones lógicas por las que ni siquiera debería haber intentado estirarla. Pero en obediencia a la palabra de Dios, lo hizo.
Muchos de ustedes quieren el éxito, pero su vida está envenenada con ira. Están llenos de resentimiento y amargura del pasado. Quieren éxito, pero no tienen ni una meta, no tienen un propósito definido. Tal vez están tratando de llegar al éxito sin Dios, dándose palmaditas en la espalda como un hombre hecho a sí mismo. Has esperando que cambien las circunstancias en lugar de cambiar tu actitud. Has vivido auto compadeciéndote, inventando excusas que suenan religiosas.
Deja de hacer excusas y escucha.
Dios está diciendo: “Si pones tu mano en mi mano, te haré más grande que cualquier cosa que hayas soñado con ser”.
El pastor John C. Hagee es el fundador y pastor principal de Cornerstone Church en San Antonio, Texas. Mensaje traducido por avanzapormas.com Fuente: jhm.org/Devotionals/04-09-philippians-419

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